Saber hacer

La orografía natural de Villavicencio forma un minivalle dentro del propio valle de Maule, ofreciendo una gran diversidad de suelos y exposiciones. Se han llevado a cabo estudios en profundidad de los suelos (por electroconductividad) que han permitido conocer mejor su composición y así trabajar con las variedades con la mejor adecuación variedad/suelo, y desarrollar un concepto de trabajo por micro-zonas. Con el único objetivo de obtener la mejor calidad de vino, con la mejor expresión del carácter afrutado.

El seguimiento de la maduración de la uva, de acuerdo con un protocolo único desarrollado por Baron Philippe de Rothschild Chile, permite recolectar cada parcela en su punto de madurez óptima.
La vendimia de las uvas blancas tiene lugar temprano por la mañana para preservar sus características aromáticas. La recogida de las uvas tintas se realiza variedad por variedad.

CON EL FIN DE REVELAR LA CALIDAD DE LA MATERIA PRIMA, SE HA IMPLANTO UN PROCESO DE VINIFICACIÓN EXTREMADAMENTE RIGUROSO Y ADAPTADO A CADA UNO DE LOS MICRO-TERRUNOS ESTABLECIDOS.

El saber hacer de Baron Philippe de Rothschild en materia de vinificación permite elaborar vinos que expresan plenamente su identidad chilena, poniendo en valor la autenticidad y la elegancia de cada variedad. Una verdadera inmersión, un camino que recorre la expresión de los terruños y de sus singularidades.

El saber hacer de Baron Philippe de Rothschild en materia de vinificación permite elaborar vinos que expresan plenamente su identidad chilena, poniendo en valor la autenticidad y la elegancia de cada variedad. Una verdadera inmersión, un camino que recorre la expresión de los terruños y de sus singularidades.

La crianza de los vinos Mapu Reserva y Mapu Gran Reserva está orientada por la cata de cada lote. Dicha cata determinará la necesidad de una crianza en madera y su duración. El objetivo es obtener el mejor equilibrio entre la expresión de los aromas de frutas y las notas amaderadas.

El objetivo para los vinos de variedades Mapu es conservar la más pura expresión del carácter afrutado, por ello la crianza no se realiza en madera.

Se procede al embotellado de los vinos en una atmósfera exenta de oxígeno, siempre con el fin de no alterar la rica y sutil paleta aromática de Mapu.